Puede ser que hayas estado expuesto a una experiencia traumática directa o indirectamente, o bien que tengas conocimiento de que alguien cercano a ti le ha sucedido, y que dicha experiencia sea tan fuerte que sea difícil que otros entiendan por lo que estás pasando. Puede ser que, aunque sucediera hace tiempo, esa experiencia reaparece constantemente, afectando toda tu vida, sufriendo flashbacks, pensamientos ansiosos, conductas de evitación ante situaciones determinadas, bloqueo e hipervigilancia, o quizás puede ser que te produzca insomnio y pesadillas. Sientes que esa experiencia traumática que pertenece al pasado, la estás reviviendo continuamente, como si fuese una realidad del presente. En cualquier caso, es de entender que estas alteraciones provoquen en ti irritabilidad, enfado, visión negativa del mundo, los demás o ti mismo y aislamiento.
Si presentas estos síntomas es hora de consultar con un profesional, ya que los síntomas del TEPT provocan problemas en el ámbito laboral, personal, y de todas las facetas de la vida, perdurando al menos un mes tras el acontecimiento traumático.